COSAS QUE HACE TU PAREJA Y QUE CERTIFICAN QUE TE VA A SER INFIEL PRONTO
Estos repuntes son típicos de los periodos postvacacionales, ya que durante los días de ocio también se incrementan los roces por la mayor convivencia. Lo que no ha sido capaz de aventurar nadie es el auge de la infidelidad online. Debido a las circunstancias, la tecnología ha sustituido al contacto físico de todo tipo. Desde el principio de la pandemia hay mucha menos vida fuera de casa y ha aumentado el tiempo en internet, sobre todo en las redes sociales, que son una forma habitual de entablar relaciones con desconocidos. Dicho de otro modo: no se percibe un peligro real para nuestra relación. Esto hace que se inicien coqueteos y relaciones virtuales con una sensación de impunidad y de autoindulgencia, aunque no hace falta que haya sexo real para que se trate de una infidelidad. A esto hay que añadir que es bastante frecuente enviar fotos íntimas, lo que se acerca bastante a un engaño a la pareja. El concepto lo gestó el psicólogo Martin Graff con el nombre de 'microcheating' y hace referencia a cuando alguien 'flirtea' con otra persona de forma virtual.
¿Y si es solo un poco de dinero?
Esta infidelidad consiste en una relación afectuosa o sentimental con una persona distinta de la pareja habitual. El genuino concepto de infidelidad es de difícil precisión, ya que no necesariamente implica tener relaciones sexuales con otra andoba. Puesto que la confianza es una cuestión muy subjetiva, cada individuo puede considerar como infidelidad algo distinto. Por otro lado, las propias percepciones sobre qué es infidelidad y qué no varían mucho en función de si se atribuyen a uno mismo o a la pareja. En este arrepentido, se han realizado estudios que demuestran cómo cambiamos nuestra percepción en actuación quien comete la infidelidad. Así, comportamientos que pueden considerarse inocentes cuando los hace uno mismo, son entendidos como inaceptables si los hace la galán. Son muchas las razones que pueden hacer que una persona sea infiel con su pareja. Algunas personas simplemente no creen en la monogamia.
Aun en las aplicaciones de citas como Tinder, hay jóvenes que ponen en su perfil no tengo deudas, un indicativo informal de que el guión del dinero entre las parejas no es menor. Esos fondos escondidos, agrega, podrían ser utilizados, por ejemplo, para la jubilación o para la facultad de los hijos. Un tema complicado, considerando que casi dos tercios de quienes usan tarjetas, arrastran deudas de un mes al otro. Provoca discusiones, daña la confianza y en algunos casos lleva a la separación o el divorcio. Muchas parejas deciden albergar cuentas bancarias separadas. Por ejemplo, es posible que una pareja decida dejar un porcentaje del salario para ahorrar en conjunto o que cada individuo deje una parte de sus bienes para usarlos libremente. Las fórmulas son casi infinitas, pero lo recomendado es discutir el plan con anticipación.