OJOS DEL SALAR
Francisco se dirigió a las diez mil personas presentes en Plaza San Pedro luego de rezar la oración a María y recordó que a principios de febrero muchos países del Lejano Oriente celebran el Año Nuevo lunar. Es una pregunta que nos ayuda a comprender mejor a Dios. Vemos un reflejo de esto en aquellos padres que son conscientes de la ingratitud de sus hijos, pero no por ello dejan de amarlos y hacerles bien. No lo encuentran quienes buscan milagros, sensaciones nuevas, una fe hecha de poder y signos exteriores. En cambio, lo encuentran quienes aceptan sus caminos y sus desafíos: sin quejas, sin sospechas, sin críticas y sin caras largas. Debemos salir de esta fijación, de permanecer instalados en nuestras posiciones. El Señor pide una mente abierta y un corazón sencillo. Y cuando una persona tiene una mente abierta, un corazón sencillo, tiene la capacidad de sorprenderse, de asombrarse. Dar ahora.
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Solo adorando esta presencia aprendemos cómo recibirlo adecuadamente . Adoración del Santísimo Bateo El horario es los miércoles de am a pm. Hay varias horas donde sólo 1 persona se ha comprometido a estar presente. Lo abstracto sería tener al menos 3 - 4 personas por cada hora. Entendido, simplemente, la Adoración Eucarística se adorando u honrar la Presencia Eucarística de Cristo. En toda su esencia En el momento de la consagración, durante la misa, los dones del pan y el vino se transforman transustanciado en el cuerpo y la matanza de Cristo, en el Altar. Esto significa que no sólo son transformados espiritualmente, sino que son en existencia sustancialmente transformados en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Los medios conservan la apariencia de pan y vino, pero son de hecho el cuerpo y la sangre de Jesucristo.
Ágora de San Pedro Domingo, 6 de febrero de El Evangelio de la liturgia de hoy nos lleva a las orillas del Mar de Galilea. Lc 5, Había sido una confusión en que las cosas habían aparecido mal, sin pescados, pero Pedro confía y va mar adentro. Para acusar. Es una bella imagen para nosotros también. Dos carcomas muy peligrosas. Elige subirse a nuestra barca. Desde ahí quiere anunciar el Evangelio al globo.
