HÁBITOS PARA ACTIVAR TU ENERGÍA Y LLEGAR AL FINAL DEL DÍA
La fatiga y el cansancio son problemas comunes y las causas posibles son numerosas. Al analizar los motivos, lo primero que debemos hacer es descartar cualquier problema de salud, ya que la fatiga muchas veces acompaña a una patología. Las causas de la fatiga pueden ser de naturaleza fisiológica y puede ocurrir debido a la falta de sueño, la falta de ejercicio, un esfuerzo inusitado, el cambio de estación o una dieta inadecuada. La fatiga también puede ser mental y se puede manifestar como ansiedad, estrés y desmotivación.
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Ese es uno de los consejos de la publicación especializada en salud de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, Harvard Health Publishing. Un cambio de dieta podría ayudarte Así lo explica la neurocientífica Wendy Suzuki en la charla TedTalk: The brain-changing benefits of exercise Cambios en el cerebro debido a los bienes del ejercicio. No le apuestes a los suplementos En el mercado hay una gran variedad de suplementos que prometen elevar tus niveles de energía y hasta se autodenominan suplementos antienvejecimiento. Y en algunos casos, los útiles secundarios todavía generan un signo de interrogación. De acuerdo con Harvard Health Publishing, el hierro, por ejemplo, únicamente te ofrece energía si tienes una clara deficiencia, la cual un facultativo puede detectar con una prueba de sangre. De lo contrario, indica, no es necesario que lo tomes y sé consciente de que consumir gavilán en exceso puede ser, de acción, dañino. De acuerdo con el NHS, la mayoría de las personas no necesitan tomar suplementos vitamínicos para favorecer sus niveles de energía. Sin bloqueo, hay personas que podrían experimentar alguna insuficiencia y necesitar un suplemento.
La salud no es solo física, si no también mental y emocional. Dormir suficientes horas Las horas de alucinación van variando a lo largo de la vida de una persona, empero si nos referimos a niños y niñas, de manera general podríamos largar que durante los primeros tres abriles las horas de sueño van decreciendo. Los recién nacidos necesitan dormir de 16 a 20 horas cada fecha. Es importante tener en cuenta que esto puede variar y cambios en las horas de sueño de 12 a 22 horas es habitual y no indica ninguna situación irregular.
